“Sos mi amor, lo mejor de mis sueños.
El mejor gusto, el mejor olor.
Sos mi eterna pasión, mi aprieto en el pecho.
Mis suspiros, mi risa sin motivo aparente.
Mis lágrimas involuntarias, mi nudo en la garganta.
Sos lo que siempre quise, lo que aún sigo queriendo.
Sos el sentido de millares de actitudes que he tomado o que deseé tomar.
Los momentos que pasaba junto a ti eran la mejor parte del día y muchas veces el porqué del día.
Eras motivo de mis ganas de seguir siendo. Pero, ahora, no estás aquí.
No te encuentro, no te veo, no te siento, ya no te tengo.
Resta solamente tu recuerdo en mi memoria, y, en mi corazón, mi amor que es tuyo.
Ya no somos más nosotros, ni en nuestros pensamientos, en nuestros sueños, nuestras posibilidades.
Nuestra secreta complicidad ya no existe, lo nuestro ya no existe, lo dejaste olvidado en el tiempo. Un tiempo que también se olvidó de mí.
Hoy, sigo sin querer, en el vacío, porque así quiso mi destino.
Nada sé de mis senderos, nada espero. Apenas sigo, sin pretensión alguna, y acepto lo que me trae la vida. Apenas sigo en el vacío…ya no estás aquí.”
(Karen Raquel Tanski Paraná)
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